Participar en los ensambles que coordina Pablo es una experiencia muy linda. En lo particular, viniendo de un instrumento melódico como la flauta, me brindó la posibilidad de conocer un montón de conceptos y recursos armónicos que, poco a poco, voy empezando a incorporar al momento de tocar. Además de ampliar mis conocimientos sobre el género del jazz, participar de estas clases, mi sirvió para aprender a escuchar la música de manera diferente. Pablo, además de ser muy buen docente es una persona muy cálida y entusiasta. Sabe generar el clima perfecto para que, al momento de improvisar, podamos soltarnos y escucharnos, para que empiecen a fluir ideas, emociones y una conexión muy intensa con los demás participantes. A su vez, por cómo Pablo se involucra en las improvisaciones, uno se lleva de regalo el placer de, al menos por un ratito, haber tocado con “tremendo” músico”